"Hoy, tuve que marcharme un poco antes que tú, pero sólo por un tiempo, por eso te pido valor. No te encierres en tu dolor, ni busques explicación; por el contrario, levanta la cara en alto. Sigue viviendo tu vida día a día con una sonrisa, como la viví yo. No tengas miedo ni te sientas sola, que ahora más que nunca estoy cuidando de ti. Lucha por las cosas bellas, brinda tu mano a quien lo pida, dale amor a quien lo exija, y en mi memoria y en mi nombre sé feliz. Quiero que me recuerdes como el Hombre que siempre fuí, pleno, bromista, positivo y feliz, y el día que emprendas tu viaje no temas. Quiero que vueles muy alto, tan alto como volé yo, que te estaré esperando, sentado junto al Señor."